Por un lado tenemos a los buenos duendes pero también pueden ser malos y por eso, te queremos dar todas las pautas y mejores consejos para que estos duendes malignos se vayan del hogar.
Efectivamente, es muy habitual que los niños se asusten con estos duendes ya que solo quieren jugar y hablar, algo que no necesariamente todos los pequeños quieren y aún más a altas horas de la madrugada.
Entonces, ¿cómo espantar a los duendes malos de nuestra vivienda para siempre? ¡Vamos con 5 consejos!
Indice
Primer truco para ahuyentar a los duendes malos
Una fórmula muy efectiva y fácil es
- Agua bendita,
- 1 litro de algún alcohol como tequila o whisky
- Una baraja
- Unos dados
- Un espejo
- Unas canicas.
Una vez juntado todos estos elementos, esperaremos a media-noche para jugar con esos duendes. Es muy importante jugar un largo tiempo para que no sospechen nuestras intenciones de quitarlos de casa. (¡Seamos astutos y pacientes!)
Una vez ganado la confianza del o los duendes, le invitaremos a tomar una copa de uno de esos alcoholes con el único propósito “emborracharlo”. Una vez conseguido esa borrachera en el duende, normalmente se pondrá a llorar como un niño pequeño con un sin parar hasta desvanecerse. En este momento, aprovechamos ese momento para dar con el cinturón diciéndole de que no vuelva más a nuestra casa.
Finalmente, se irá seguramente con cara de vergüenza y sin ganas de volver más.
Pero para garantizar ese objetivo, también será necesario rezar 3 veces el Ave María, 3 veces el Padre Nuestro y el Salmo 91.
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Segundo truco para ahuyentar a los duendes malos
Este a primera vista puede chocar algo, incluso verlo muy vulgar pero no deja de ser otro solución para quitar a los duendes de casa.
Se trata de cagar fuera de casa (mejor) y esperar a que el duende recoje esas heces para peinarse con ellas. Es curioso saber que aquí el duende piensa que es perfume.
Aquí la finalidad es también distraer al duende para tu escapar por tu camino.
Tercero truco para ahuyentar a los duendes malos
Se dice en las habladurías de las calles, que también podemos tejer dos hojas de palmas de palmeras por la parte trasera. Con ese elemento, ventilamos al duende por detrás para distraerlo y ahí es cuando buscas el camino.
Cuarto truco para ahuyentar a los duendes malos
Es de saber que a los duendes les encanta el orden en casa. De hecho, un duende nunca entrará en un hogar sucio y desordenado.
Por eso, si quieres que se vaya rápido es simplemente tener la casa sucia, desordenada y si necesario poner olores fuertes como incienso o perfumes fuertes. Incluso como persona puedes dejar de asearte unos días para que ese duende te vea sucio y con malos olores. En ambos casos harás que ese duende se vaya.
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Quinto truco para ahuyentar a los duendes malos
Quizás este sea el más rápido y fácil y, sin duda, más agradable, es vestir toda nuestra ropa al revés incluido los zapatos, gorra, sombrero, complementos como calcetines, calzoncillo, bufanda, etc… y de esta forma podrás encontrar tu camino y no volver a ver más al duende incordio.
Conclusión
Primero debes saber que los duendes tal como son, no tienen porque ser malos para el hogar. Es cierto que pueden causar en ciertas circunstancias agobio y estrés ya que son muy juguetones y ruidosos.
Por este motivo, debes valorar si es tan necesario ahuyentarlo o no de casa ya que también se dice que traen buenos augurios a los vivientes de ese hogar.
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